Encuentro juevero; El último suspiro

 Mag en medio de este Agosto caluroso nos invita a que escribamos sobre lo que entendemos es " El último suspiro" Os dejo mi propuesta

"Siempre había oído que toda tu vida pasa ante a tus ojos el segundo antes de morir. 
Para empezar, ese segundo no es un segundo en absoluto, se hace algo inmenso, como un océano de tiempo. 
En mi caso aparecía yo tumbado boca arriba en el campamento de los boy scouts mirando estrellas fugaces y las hojas amarillas de los arces que franqueaban nuestra calle; o las manos de mi abuela y su marchita piel, que parecía papel; y la primera vez que contemple el nuevo Firebird de mi primo Tony; y Jane. Y Jane... Y Lisette. 
Supongo que podría estar bastante cabreado por lo que me pasó, pero cuesta seguir enfadado cuando hay tanta belleza en el mundo. A veces siento como si la contemplase toda a la vez, y me abruma, mi corazón se hincha como un globo que esta a punto de estallar. Pero recuerdo que debo relajarme, y no aferrarme demasiado a ella, y entonces fluye a través de mi como la lluvia, y no siento otra cosa que gratitud por cada instante de mi estúpida e insignificante vida. 
No tienen ni idea de lo que les hablo, seguro, pero no se preocupen: algún día la tendrán."

(American Beauty)

   

Laura ha tenido un día estresante

Va deslizando hacia abajo su pantalón, 

Desabrocha los botones de nácar de su blusa palo rosa.

Desabrocha su sostén color uva. Piensa:¿ Dónde estás…?

Siempre la produjo sensación de libertad andar descalza sobre el suelo fresco.

Lo hace de puntillas, desde niña.

Abre el grifo de la ducha

Un abanico cónico de agua irrumpe contra el suelo.

Intenta dominar su espesa mata de pelo, se le escapa de la pretensión de moñearle.

Se enfada jocosamente y le grita entre risas ¡ Estaos quietos o me rapo la cabeza… !

Ya el agua resbala.

Su cuerpo agradece la hidratación.

Te desea, siento como se ha hinchado extrañamente al pensarte.

Mi mano libre extiende cuidadosamente el agua,racionándola, disfrutándola.

Siento mi vientre morir de sed,

me esmero en él

mientras con susurros le hablo y reparto el agua con suavidad.

Luego comienza el ritual

El dedo medio se hunde en el frasco de la miel, 

le llevo a mi cara y toca mi nariz.

Resbala a mis labios

Luego dibuja mi barbilla, desciende por mi cuello…

Mientras mi mente saborea los cinco sabores de tus dedos: madera, café, Ron, chocolate y tu miel

Resbalo azulejos abajo hasta caer sentada, en

un último suspiro